El tema de la identidad, o el conocimiento de la propia permanencia en el tiempo ha sido, y sigue siendo uno de los temas característicos de la psicología contemporánea. La mayor parte de nuestras funciones psíquicas tienen una continuidad, por lo que lo vivido se une entre si por la memoria y se fija a un complejo entramado de representaciones y recuerdos.

Así pues, se entiende la orla en su sentido literal de agrupación de retratos de condiscípulos de una promoción escolar o profesional cuando terminan sus estudios u obtienen el título correspondiente. Las fotografías que en ella aparecen son entendidas como un medio de conservar el recuerdo a través de una imagen, a modo de archivo.
Con todo esto, la orla parte con el objetivo de reflexionar sobre la necesidad humana de preservar el recuerdo del pasado. Esto se hace evidente en una serie de objetos que por proceder directamente o por haber estado en contacto con determinada persona o situación mantienen viva su memoria.

Estos conceptos han sido tratados por escritores y artistas como Samuel Beckett o Christian Boltanski, quienes desde principios de los setenta tratan el poder evocador de los objetos, no del objeto en si mismo, sino del registro fotográfico, absorbidos desde sus primeros trabajos por la imagen de archivo.

Boltanski crea una obra que es, al mismo tiempo, reconocida por el espectador como un objeto de carga sentimental. Su trabajo plantea la necesidad de dejar huella, lo que hace que quede íntimamente unido a la idea de orla como archivo y con la finalidad, como con sus recopilaciones de conseguir la pervivencia de la memoria, lo que sería descrito por Eliane Burneo como: “los restos mortales”.
Del mismo modo, Samuel Beckett pretende la simpatía del espectador por medio de la descripción del objeto (lo que para Boltanski era el documento fotográfico, lo es la descripción para Beckett).

Este proyecto consiste en la realización de una "orla-retrato" de la clase de Proyectos de escultura 1ºC. Esta propuesta está planteada de una forma participativa, e involucra a todos y cada uno de los alumnos de dicha asignatura. A cada alumno se le daría una caja, su caja, en la cual podría introducir lo que considerara que lo identifique, así como pintarla, modificarla, etc...Dicha intervención quedaría limitada al interior de la caja, debiendo mantener intacto su exterior.
Todos los alumnos dispondrían del mismo espacio de intervención, el cual, al permanecer inalterable externamente crearía una sensación de homogeneidad, al igual que sucede cuando nos encontramos frente a una persona que no se conoce y que hace que en apariencia sea igual a cualquier otra, sin nada en particular que la caracterice y la diferencie.
La caja se mostraría tal y como es entregada, dejando al espectador que sea él quien investigue y se enfrente a ella, como sucede también con una persona, que pese a ser un solo individuo, dependiendo de la relación que se tenga o el ámbito donde se desarrolle, dicha persona se nos mostrará de una u otra forma.El profesor también participaría en la propuesta y su caja quedaría dispuesta en solitario en la parte superior de una serie de tres filas, de las que cada una de ellas constaría de seis cajas. Dicha disposición recordaría a un aulario, donde el profesor ocupa dicha posición y las demás cajas harían referencia a los pupitres de los alumnos.
Aspectos como la pluralidad y la diversidad son características íntimamente unidos a la orla, lo cual no imposibilita que existan vínculos en común entre los que la forman. Sin embargo es este, unos de los aspectos más destacados que aflora en este trabajo, puesto que todos sus componentes, pese a pertenecer a un mismo grupo y colectivo, no presentan puntos de unión. Esto hace reflexionar sobre si es esa falta de nexos en común lo que crea la fragmentación como grupo, potenciando la individualidad, o si por el contrario, es esa individualidad lo que hace que no surjan nexos en común.


Este trabajo nos muestra puntos de vista tan diversos como la persona que se muestra mediante tarjetas de visita, abordando su situación social y estatus, hasta otra que aporta su ocultación, representado en la caja cerrada por completo y a cuyo interior es imposible acceder.
También podemos encontrar trabajos en los que aparecen aspectos tan personales como la duda y el caos, presente en la caja repleta de interrogantes, la del laberinto, o la que esta dividida en dos secciones, una completamente vacía y otra llena de recortes y notas...
Otro aspecto expresado es el amor a la naturaleza planteado en una caja, en cuyo interior hallamos una serie de pilas junto a una nota donde se hace referencia a la preocupación por el reciclaje y el medio ambiente, el mismo sentimiento se plasma en la caja del pedal de bicicleta, la cual también podemos interpretar no solo como una preocupación ecológica sino también como la posibilidad de transito.
Otros aspectos que quedan patentes en el proyecto son las aficiones y trabajos; desde donde podemos observar una caja repletas de billetes de tren autobús...de diferentes países, hasta una caja repleta de artículos de joyería para la realización de las mismas.
Por último destacar una de las cajas en la cual se nos muestra las cosas que no tenemos más remedio que aceptar, como una enfermedad y las que podemos elegir, estando esto representado mediante las pastillas y las golosinas.
Esto hace del proyecto un trabajo fresco, plural y variado dotado de una riqueza tanto formal como de recursos.